¿Conoces el ciclo del agua? Este componente, tan importante para el mantenimiento de la vida en la Tierra, sufre un proceso de transformación constante, pasando de un estado a otro. Se puede encontrar en los formularios:
Y para llegar a estos estados, sufre cambios de los que quizás hayas oído hablar en tu época escolar, en las clases de ciencias y química. Estos son los siguientes:
Son estos procesos los que componen el ciclo hidrológico. Pero, ¿por qué es importante saber esto?
Estos conductos de agua permiten que circule por el medio ambiente y se utilice de las más diversas formas, promoviendo el equilibrio de los ecosistemas y su propio mantenimiento. Además, el ciclo del agua es un determinante de la variación climática e influye en el nivel de los mares, ríos y océanos.
¡Siga leyendo y obtenga más información sobre cada uno de los pasos de transformación de este recurso!
El agua, como se vio anteriormente, se puede encontrar en diferentes estados. El paso de uno a otro es precisamente lo que caracteriza el ciclo hidrológico. Este movimiento constante del recurso se produce con la ayuda del Sol y la gravedad.
Las principales etapas del ciclo del agua son:
Esta es la primera etapa del ciclo del agua. En él, el recurso pasa de un estado líquido a un estado gaseoso. En la naturaleza, este proceso ocurre lenta y gradualmente y está especialmente influenciado por la temperatura y la irradiación solar.
En general, cuanto más alta es la temperatura, más rápida es la evaporación.
Tras evaporarse y alcanzar un estado gaseoso, este vapor de agua llega a la atmósfera para iniciar la segunda etapa del ciclo del agua: la condensación. Así es como el mineral volverá a su forma líquida.
En este proceso, se forman nubes. Las gotas de agua suspendidas se juntan poco a poco entre sí, por lo que se hacen más grandes y pesadas y luego regresan a la superficie terrestre en forma de lluvia.
¿Recuerdas que es en la condensación donde se forman las nubes? En la precipitación, esas gotas de agua que se unieron ahora regresarán a la Tierra. Es decir, este es el momento de liberar la lluvia.
La lluvia siempre cae en alguna parte, ¿verdad? Ya sea en la superficie de la Tierra, en ríos o mares. Pero la etapa de infiltración se refiere a su absorción por el suelo. Esto se debe a que es a partir de este proceso que se forman las aguas subterráneas, los acuíferos y otras fuentes de agua subterránea.
El agua que absorbe el suelo, además de contribuir a la formación de «reservas» naturales de este líquido, también actúa para regar las plantas a través de sus raíces. El exceso se libera precisamente durante la fase de transpiración.
La transpiración, como la evaporación, es la transformación del agua líquida en vapor.
¿Recuerdas que la evaporación es el paso del agua en su estado líquido a su estado gaseoso? Aquí, en la fase de sublimación, el agua pasa del estado sólido al estado gaseoso: pasa directamente del hielo al vapor.
Es posible que este proceso no sea tan notorio en la vida cotidiana, pero es bastante común en los glaciares del Polo Norte, por ejemplo.
Al igual que con la evaporación, el vapor de agua producido en esta etapa se transfiere a la atmósfera.
¿Y por qué es importante conocer el ciclo del agua? Hoy en día, este recurso no solo es indispensable para el mantenimiento de la vida en la Tierra, sino que también es un componente esencial para llevar a cabo una serie de actividades en el mundo moderno, ya sean industriales, agrícolas o comerciales.
Por no hablar de las tareas cotidianas, como lavarse las manos, bañarse, cepillarse los dientes, cocinar y otras, que, sin acceso al agua tratada, se vuelven imposibles e incluso peligrosas para la salud.
Sin embargo, se trata de un recurso amenazado. Aunque el planeta Tierra es conocido por su abundancia de agua, solo una pequeña parte puede usarse para el consumo humano. Alrededor del 97% de este insumo se encuentra en los mares y océanos, y solo queda el 3% del agua dulce, del cual el 2,5% se encuentra en los glaciares.
Y no se detiene ahí. Este simple porcentaje de agua todavía se ha visto fuertemente afectado por las acciones humanas, como la contaminación y los procesos de urbanización e industrialización, lo que advierte de la necesidad de que la población civil, los gobiernos y las empresas garanticen medidas destinadas a mejorar el agua y preservarla, incluida la atención al ciclo del agua.
Después de todo, este proceso es fundamental para el mantenimiento de este recurso en el planeta. Además, como habrás notado, cada etapa hidrológica influye directamente en el equilibrio de la naturaleza. Por ejemplo, las transformaciones del agua interfieren con:
¿Acabas de ver lo importante que es este ciclo? Ahora que conoces bien este proceso, ¿qué tal si comienzas a aprender cómo contribuir a su preservación? Continúe con el blog y vea qué es la gestión sostenible del agua y algunos ejemplos de cómo ponerla en práctica.